Alejandra
Pizarnik nació en Buenos Aires el 29 de abril de 1936 y murió en esa misma
ciudad en 1972, a los treinta y seis años. Poeta, narradora y ensayista,
su obra ha ido creciendo con el tiempo hasta adquirir la categoría de clásico
indiscutible.
La
poesía de Pizarnik es surrealista, sin embargo no se encasilla fácilmente en
ningún movimiento dentro de su generación. Firmemente apolítica e influenciada
en su lirismo por Antonio Porchia, los simbolistas franceses, en especial Arthur Rimbaud y
Stéphane Mallarmé, por el espíritu del romanticismo, y por los surrealistas,
Pizarnik escribió libros poéticos de notoria sensibilidad e inquietud formal
marcada por una insinuante imaginería. Sus temas giraban en torno a la soledad,
la infancia, el dolor y, sobre todo, la muerte.
Cenizas
La noche se
astilló de estrellas
Mirándome alucinada
El aire arroja odio
Embellecido su rostro
Con música.
Mirándome alucinada
El aire arroja odio
Embellecido su rostro
Con música.
Pronto nos iremos.
Arcano sueño
Antepasado de mi sonrisa
El mundo está demacrado
Y hay candado pero no llaves
Y hay pavor pero no lágrimas.
¿Qué haré conmigo?
Porque a Ti te debo lo que soy
Pero no tengo mañana
Porque a Ti te...
La noche sufre.
Alejandra
Pizarnik. La última inocencia (1956)
Publicado por Patricia Dizanzo
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